AUSTRALIA.- Durante una fiesta familiar, un peligroso pitón, estuvo a casi nada de comerse a un pequeño niño de cuatro años, el menor llamó con todas sus fuerzas a su padre, y este velozmente acudió a su llamada de auxilio.
Evan Thompson, padre del pequeño, tomó un mazo y aplastó la cabeza del animal, de esta manera pudo salvar a su hijo. El niño fue trasladado rápidamente al hospital, donde se reveló que no resultó con heridas graves y actualmente sigue recibiendo tratamiento, debido a que el pitón engulló su pierna.
Se desconoce de dónde pudo haber salido esta gran serpiente.
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